martes, 28 de abril de 2009

MIS MUJERES DE VOLVER

Las mujeres de mi familia me recuerdan a las protagonistas de Pedro Almodóvar en "Volver". Un universo de féminas con carácter manchego.

Son mujeres sin mucha cultura, de la de los libros y las aulas, pero con una cultura de la dedicación doméstica que no puedo reconocer en ningún hombre. No es machismo ni feminismo. No es atribuir un rol social. Es una esencia propia. Son mujeres capaces de volcarse "exageradamente" en la familia y en las tareas domésticas. Han sido educadas en esa manera de ver la vida y así lo han intentado inculcar a sus hijas. Así ha sido durante varias generaciones..., hasta que ha llegado la pretendida sociedad de la "igualdad" y les ha arrebatado el poder de la tradición.

Madrugones para hacer la casa, guisos caseros, cuidado hasta en el mínimo detalle de la estancia hogareña, mimo y atención doméstico, organización, ahorro. Así son las mujeres de mi familia.

Ahora el gobierno anuncia un reconocimiento oficial, un título que acredite esta profesión que es el cuidado de una casa y de una familia. Bienvenido.

"Las mujeres de ahora ya no limpian como las de antes, ni saben hacerlo". Son recientes palabras de mi abuela. Es verdad. La sociedad ha ido poniendo otra realidad frente a los ojos de las mujeres. Hay otra vida fuera de la casa. Mi abuela empieza a descubrirlo ahora. Está matriculada en la Escuela de Adultos para aprender a leer. "No haré carrera", me dice. No importa. Lo importante es descubrir que existen varios caminos. No sólo uno. Y a partir de ahí ELEGIR. Cualquier elección será respetable.

PD. Una vez concluidas las tareas del hogar, las mujeres de mi casa se reúnen para hablar. Recomiendo, como estudio sociológico, asistir a un encuentro en el que están todas juntas. Los diálogos, la frescura, las risas. Todas tienen sus problemas con los maridos y con las hijas, pero en ese momento, no caben preocupaciones.
(Quizá estoy idealizando mi entorno de mujeres manchegas, pero no puedo ser objetiva. Lo llevo en la sangre).

PD 2. Todas somos mujeres. Mi abuela tiene 4 hermanas, tres hijas (entre ellas mi madre), cinco nietas ( entre ellas, yo) y una bisnieta (mi hija). Evidentemente, no puedo ser objetiva. Qué bonito es el mundo femenino!!!.