EN LA PIEL DEL OTRO (qué tarea más infrecuente)

No ha sonado el despertador. Dos horas más de sueño. Pasan rápido. El tiempo despierto es más lento, mucho más. No hay café. Me duele el alma. Qué cursi. Es un fuerte pinchazo en la boca del estómago. Achisss!!! Gripe A? Ahhhhhhhhhhhh.
Cuál es el camino? Intento buscar una respuesta en la gente que corretea por la calle de buena mañana (a las once???, no, ya no es primera hora). Desasosiego. El humor siempre es buen refugio. No se me ocurre nada gracioso. La distancia es abismal entre los representantes políticos y los ciudadanos. ¿Sería igual en la antigua Grecia? Hay males que se arrastran por los siglos de los siglos. No hay solución. Se me ocurren muchos lugares comunes: "hay que joderse, hay que buscarse la vida, nadie va a venir a sacarte las castañas del fuego". 85 mil nuevos parados. Nada ha funcionado, un año después. La situación es peor. Una casa que se te cae encima, paredes que te acorralan, ambiente claustrofóbico, sin rumbo, abismo a los cincuenta.

-papá, llego tarde al autobús. Me voy corriendo que tengo un exámen.

Es el futuro. ¿Qué camino estamos sembrando? Lo único que quedará es la recompensa del esfuerzo. El resto, es suerte, fachada y mamoneo.

Ringggggg

- Diga.
- ..........!!!!!!!!

- Si, 85 mil nuevos parados. Sí, señor ministro, he visto el dato. Tomo un café y....mmmm, no mejor voy corriendo a la oficina y preparamos la rueda de prensa. Nada de catastrofismos, sí señor.